VACACIONES CREPUSCULARES

Por Ailed García Barreto
4to Semestre, Ciencias de la Comunicación

Es difícil no darse cuenta del fenómeno que ha venido como resultado de los libros de la saga de Crepúsculo, el cual, creció aun más con el estreno de las películas de dos de los libros y próximamente de un tercer film, Eclipse, que se estrena en junio.

Los vampiros de estas novelas no viven, como la de otros vampiros, en Transilvania o algún castillo localizado en Europa, más bien, los encontramos viviendo de una forma más moderna en Estados Unidos de América.

En la búsqueda de un hogar para sus personajes, Stephanie Mayer buscó en Google cual era el lugar más lluvioso de América y como resultado encontró Forks, Washington. En realidad la autora jamás ha visitado este lugar pero decidió que el clima era perfecto para el desarrollo de sus novelas.

Como era de esperarse, Forks un pequeño pueblo de 3000 habitantes, ahora tiene miles de visitantes que han dado como resultado un incremento del turismo en un 600%. La Cámara de Comercio del pueblo tiene la furgoneta de Bella aparcada en la entrada y se han abierto una docena de tiendas de souvenirs.

Las películas no fueron filmadas ahí, sino en una recreación en varios pueblos de Oregón, Portland, Vancouver, Columbia Británica y Montepulciano en Italia. Estos sitios han creado varios tours para los miles de fanáticos ansiosos por sentirse un poco más cerca de sus amados personajes.

Quienes no están tan contentos por estos hechos son los nativos de la reserva Quileute, ya que, sus tierras sagradas se ven perturbadas por los visitantes y no tienen el cuidado y solemnidad que estas merecen.

A final de cuentas no importa que la película se rodara en lugares lejanos a los que mencionan los libros, las personas han quedado enamoradas de los sitios originales gracias a una serie de novelas que fomentan la lectura de los jóvenes. Así que si les interesa conocer alguno de estos sitios, busquen tours y vivan unas vacaciones crepusculares.